MINERAL DEL MONTE

Real del Monte
Durante siglos se ha dedicado a la minería,   conservando la belleza de sus calles y pequeños callejones.

En tiempos del virreinato se daba el nombre de Real a todo lo que estaba bajo el dominio de la corona se cree que por ese motivo lleva el nombre de RealReal del Monte del Monte. Antes de la conquista, Real del Monte era conocido con el nombre de Magotsi que proviene del otomí Ma, que significa altura y Gohtsi, paso. Actualmente se llama Mineral del Monte.

En este bello lugar se llevó a cabo la primera huelga de la historia de México en 1799 resultado de un conflicto entre Pedro Romero de Terreros Conde de Regla y sus trabajadores hace 239 años quienes defendieron sus  derechos laborales y la mejoría de sus condiciones laborales.

          

En Real del Monte se llevaron a cabo los primeros partidos de fútbol y tenis de nuestro país. En la época del auge minero durante el siglo  XIX, Real del Monte fué habitado por trabajadores ingleses convirtiéndolo en un pueblo colonial al estilo británico.

Actualmente se puede disfrutar de paseos por sus  calles adoquinadas y disfrutar la vista de las casas multicolores,  remodeladas  de tal forma que se conservan como estaban hace más de un siglo. A principios del siglo XX  en esta población habían más de 140 minas, y  la explotación de plata de la región ocupó el primer lugar del mundo. En este bello pueblito se  pueden visitar Talleres de Platería y lugares donde se muestra la elaboración del tradicional Paste que es un platillo tradicional tipo empanada hecha a base de harina, manteca y sal  relleno  de papa con carne, en la actualidad  existen de distintas combinaciones de ingredientes.

En la segunda semana de julio se lleva a cabo el Festival de la Plata, durante el cual se presentan actividades  culturales en las plazas y callejones y  una vasta muestra de artesanías en plata.

El 11 de julio se celebra el día del Día del Minero. Un atractivo turístico son los hermosos trabajos hechos a base de plata y de madera.

"Caminar por las calles es encontrar en los recodos más inesperados, esa pieza que resume nuestra experiencia en las alturas del pueblo, es saber que en Real del Monte, en manos de sus artesanos, el único fruto es la tierra."